"Arrieros somos y en el camino andamos"
Por el año de 1840 dicen que mandaron capturar al Criollo Baudilio Bustos por órdenes de Don Facundo Quiroga.
¿En dónde? Allá (Aquí) por la Rioja. Pero iba muy enfermo, dejando a su esposa María Antonieta Deolinda Correa y a su pequeño bebe. Ella (Deolinda) desesperada por encontrarlo siguió camino en búsqueda de su amado; internándose en las montoneras de San Juan.
Agotada por el calor del desierto, con hambre y sed cayó en la cima de un cerro. Murió…
Fue encontrada por unos arrieros de la región. El niño se encontraba amamantándose de los pechos de la madre fallecida, de su madre muerta. La difunta fue sepultada. Hoy se comenta que es protectora y milagrosa, agracia y concede ciertos favores. La Difunta Correa.
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